Sobre mí

Dijo el poeta cubano José Martí; “ Hay tres cosas que cada persona debería hacer durante su vida: plantar un árbol, tener un hijo y escribir un libro”. Supongo que cada cual tendrá las suyas, igualmente lícitas y validas, pero este dicho tan popular (que también se basa en una adaptación de un relato profético de Mujámmad, el mensajero del islam) siempre resonó en mí, siendo proyectos vitales a cumplir…

En cuanto al proyecto árbol, ya ayudé a plantar y cuidar algunos tiempo atrás… pero el árbol que siempre quise plantar tiene que estar en un lugar especial y ser un árbol también especial. Tuve que trabajar varios años para comprar el terreno y en breve ¡tendré mi palmera! Aunque acabo de saber que las palmeras no son árboles sino plantas y que por si fuera poco anda una plaga en ellas que no deja una viva… Habrá que poner alguna otra cosa más por si acaso, no vaya a ser!

Ser madre fue y es en mi caso el más importante. Para tener a mi hija primero tuve que encontrar a la persona idónea. ¡Y bien que la encontré! Hará casi treinta años. Con ella a día de hoy comparto camino.

Por último, el proyecto del libro también fue cosa de tiempo, de muchas emociones y experiencias ¡y ahora empiezo con dos! Soy consciente de mis limitación literarias. No soy Gabriel García Márquez ni mi admirada Rosalía de Castro, pero lo que escribo es fruto de la ilusión y de mis vivencias. Lo difícil para mí, que bien que mal, no es escribir, pues lo siento cómo una necesidad, lo que no me resulta fácil es la lucha que se establece entre el pudor y la necesidad de compartirlo. Dado el paso, os ruego humildemente benevolencia a quienes leáis mis escritos y deseo de corazón que cuanto menos os aporten algo por poquito que sea. Gracias.